miércoles, 13 de marzo de 2019

Obvio que quiero hablar de Tinder

Para sentirme mejor voy a hacer la segunda entrega de

"Tindereando con Viki"
El pibe piola

Lo encontré. El único pibe potable de Tinder. Un pibe que arranca la charla diciendo que no es tan lindo como en la foto. Manda audios. Charla sin cesar. Por fotos es lindo pero eso ya ni importa, es piola, habla, voilá!!!! En cuestión de horas pactamos juntada.
Cuando voy, estoy nerviosa como siempre, porque siempre terminan siendo unos salames o feos o piola pero no me genera absolutamente nada y despues rechazar a alguien sin hacerlo directamente para no ser forra es más difícil que la verga y bla, paja las citas a ciegas. Porque es eso esencialmente lo del Tinder, citas casi a ciegas. Pero bueno la cosa es que llego y lo veo y es lindo. Es lindo! Pero me da vergüenza mirarlo mucho porque se notaría que estoy mirando si posta es lindo y cuán lindo es y bla, pero ya arrancamos sonriendo y buena onda y eso que a mí me habia bajado el máximo sueño de la vida. Ya en el kiosko nos fichamos mejor y nos damos cuenta que nos gustamos, bien, vamos para adelante, pase pal rancho.
El es grandote alto así corte rugbier ( más tarde me enteraré que en efecto jugaba al rugby) tiene una sonrisa picarona que de toque me despierta y me saca del estado paja corporal que estaba antes para ponerme en un renovado estado paja mental. Tiene linda cara y está medio bronceado. Va. Compramos birras y vamos al depto y las tomamos.
Corte necesario en el relato para decir que ya se que no da técnicamente ir a la casa de un desconocido y que yo siempre fui media border con eso y nunca me pasó nada feo pero no lo recomiendo a pesar que yo lo haga siempre. Como que yo tengo una intuición pero se que técnicamente teóricamente no es buena idea ir derecho a casa de un desconocido, en todo caso de proceder así, manda la ubicación a una amiga de confianza, que se io, es lo que io hago.
Volviendo al tema, la charla fluye demasiado bien, tanto, que ni logramos terminar un tema y pasamos al otro y así. Coqueteo sutil de por medio, es como que en un punto empiezo a notar que estoy muy cómoda y que estoy coqueteando cual mona en celo. Eventualmente vamos cambiando de escenario hasta que terminamos en la cama.
Cogimos, si, re daba. Si no me pinta no cojo, ya aprendí. No más gauchismo, no más avivar ni desvirgar giles a menos que me paguen. Bueno el sexo con este pibe fue el mejor en año y medio. Intenso, conectado, una montaña rusa emocional, lento y rápido, duro y suave, violento y cariñoso, dominante y dominado, rico. Rico. Largo. Tortuosamente placentero.
Dormimos juntos y separados (en un momento se cambió de cama because #1plaza) pero hubo cucharita, mañanero hermoso, mimos, de todo.
Al día siguiente nos despedimos con la mejor y a los 4 días nos juntamos de nuevo, claramente motivados por la manija de la primera vez.
La segunda vez cae medio choborra pero sin perder aceite, me di cuenta al día siguiente porque me preguntaba cosas que ya me había preguntado antes. Hablamos dos segundos y mientras hablamos ya me estoy dando cuenta que hasta me calienta cuando habla, porque es inteligente y sensible y sensato y divertido y piola y todo y me le quiero subir encima. Luego me toca hablar a mí y en el medio al tiempo que dice "disculpa pero tengo que" me corta para darme un beso. Osea que le pasaba lo mismo que a mi? Ya esa cabecita Disney elucubrando teorías conspirativas cupidescas. El sexo no fue tan bueno como la primera vez, pero igual acabe, igual me gustó, igual me hizo sentir conectada, que se yo. Delirios de una quizás.
Pero piola. Y me saludo con 2 picos. Solo los piola saludan con pico.
Igual ahora ya está distante, quizás esta bien, yo porque soy una intensa del orto. Mejor que pase más tiempo así me puedo depilar para la próxima y también volver a terapia.

3 semanas

Es lo que me duró el "estar bien". Un día empecé a estar bien y se lo conté a mis amigas para que no sea un bajon ser amiga mía y fumarse toda una crisis existencial al pedo. Desde ese día que les conté, pasaron 3 semanas.
La onda se cortó cuando está semana mandaron por el grupo de WhatsApp del trabajo un "cronograma" que nunca mandan en el cual en vez de tener los 4 días que venía trabajando me quedo UNO.  A mí y a otras 3 chicas más. UN día de trabajo que se paga 500 pesos por 8+ horas. Propina 300p promedio (siendo un día bueno 500 y uno malo 100). Osea estoy de cara. Finalmente obtuve un lugar en la casa que quería vivir con las personas que quería vivir y ahora no tengo par pagar el alquiler. La vida imita al arte. Dios es un sátiro. Mi jefe es un cagador sin culpa.
Mi jefe se merece lo peor. No hay insulto que refleje la soretez humana que se encierra en su patético cuerpo flácido cuarentón. Me dan ganas de echarle vaho con olor a hongos vaginales y aliento de fumador de hace 40 años. Y que por el resto de su vida no pueda oler nada más. Me dan ganas de embrujarlo para que le dé una infección urinaria eterna. O un hpv fuertisimo de ronchas en la pija. Ponele que no para siempre, solo hasta que se arrepienta de no hacer las cosas bien con lxs trabajadorxs.
Y de nuevo la ansiedad económica, una sensación bien chota, que no te deja hacer nada porque no tenes plata para hacerlo y sabes que es el momento de otra vez salir con esa sonrisa falsa de quien pretende ser positive en un país donde todo está para el culo y tu alma a tono con todo pero necesitas conseguir un trabajo y eso significa salir a buscar donde rebajarte a menos de lo que en realidad sos en pos de lo que necesitas con urgencia. Un trabajo en relación de dependencia. Dependencia REAL 100% onda sin este trabajo no tengo VIDA. Que horror.
Un horror también ser una persona súper capacitada para emprender en algo propio y no hacerlo por miedo al fracaso y a tener menos plata que ahora por haberla invertido en algo que no dio frutos. Miedo a todo. Miedo y paja. Impotencia. Auto condescendencia. Auto compadecimiento. Ansiedad y flagelo mental.
Quien pudiera estar bien.
Si estas bien, valoralo.
No les toca a todes.