domingo, 28 de noviembre de 2010

corrí

De pronto vi esta foto y me encontré pensando: ''Esos zapatos no son tan lindos, pero a ella le quedan bien''. Ok, nuevamente, analicemos. En primer lugar, los zapatos si son lindos, el hecho de que ya no se use tanto el stiletto con punta y toda esa movida, no significa que no sea tan lindo, no te hagas la moderna Victoria. En segundo lugar, que algo no tan lindo le quede bien a ella en esta foto significa... ? QUÉ? Si supuestamente el vetado ni siquiera me importa más y aunque me importara ya no se ven! Y aunque me importara y se vieran QUÉ?
''running over the same old ground, what have we found? the same old fears''
Sigo con esos mismos miedos estúpidos. Crecí, soy la misma pero crecí en el sentido de que tomé consciencia de mi entorno y de que todo acto, por más minúsculo que sea, tiene una consecuencia directa en él, un impacto irrefutable y definitivo. Después de escribir una eternidad de lloriqueo neurótico al mejor estilo melodrama caprichoso usual en mi viejo yo, me di cuenta de que toda esa depre no tiene justificación alguna. Al principio me tomó por sorpresa y sentí que ya estaba deprimida y que no me podía sentir mejor. Y después me sentí idiota, fue como si dentro de mi mente me fuera corriendo lejos lejísimos de esos pensamientos ridículos, qué cosas absurdas que escribí! Cuando me di cuenta me sentí directamente imbécil, será imposible que yo alguna vez en mi vida deje de hacerme la víctima? Es patético, repito los patrones de comportamiento psicológico de mi mamá... Y así y todo me gusto. Porque parte de todo ese circo que afortunadamente ya BORRÉ, era una pobre-cita confesión de que no me siento suficiente, que ''no soy ni las escamas de lo que quisiera ser'', eso puse. Podés creer? Por suerte ahora me da risa. Sí, estoy a dieta pero cada vez que quiero comer algo rico digo que 'no es que esté a dieta como la de las revistas, si no que estoy tratando de variar más y no abusar de las boludeces' y en realidad no es así y cuando me salen granos y me siento gorda me quejo. Sí, no soy todos los días un ángel, a veces tengo pensamientos crueles y siento un haz de violencia interna que quiero desterrar y hasta ahora no puedo y no me levanto todos los días luciendo un cutis perfecto y MIS PANTORRILLAS ESTÁN BIEN (estuve a punto de decir que mis pantorrillas nunca van a dejar de parecer de rugbier, come on, no están tan mal). Ves? Qué me pasa? Tomé consciencia, pero a veces actúo como con la reminiscencia de esa boba que fui. Puede ser inclusive algo pedante el decir todo el tiempo que ahora soy una mejor persona, pero es que lo soy! Después de tanto pensar que mis pantorrillas son feas (a quién mierda se le ocurre pensar en sus pantorrillas de una forma negativa? ya ni siquiera me alcanzaba con odiar las partes convencionalmente odiables de mi cuerpo JÁ!) y demases barbaridades injustificadas sobre mi persona, creo que me merezco sentirme bien y orgullosa y que mi trabajo valió la pena. Esa era otra parte del discursito anterior, que no tengo garantías de que el esfuerzo que estoy invirtiendo llegue a rendir sus frutos. EN TRES DÍAS COBRO! Si eso no es un mínimo fruto de mi trabajo yo no sé qué es. Quizás sea hormonal (típico de mí, para deshacerme de mis malas vibras culpo a las hormonas, mi cuerpo siempre por algún lado carga mi peste kármica) o quizás hace mucho que no paso una tarde entera con mis amigos como para sentirme algo mimada o quizás uno simplemente necesita el drama para sentirse vivo (qué carga!). Creo que la segunda opción es la más acertada, todos estos meses queriendo secretamente tener un novio me forcé a aceptar, tolerar, convivir y hasta disfrutar de mi soledad y funcionó, en un punto se empezó a dar naturalmente la distancia que siempre se necesita tener entre uno mismo y el resto de la gente, intimidad le dicen (algo que yo no conocía o en caso de que la conociera, quería compartirla y comentarla con todo el mundo). Y lo más gracioso es que todo empezó mirando las fotos de shir, pensando en el ale y escuchando los discos que escuchábamos cuando estabamos juntos. O sea qué necesidad había de auto-inducirse a la depresión? Tan clásico de las mujeres, como si la depresión funcionara como descarga emocional; y hasta ahora que lo digo me acuerdo de que yo decía que llorar de vez en cuando me 'purificaba'. Amante del melodrama! Qué estúpida. Sí me gusta llorar cuando me emociono, no lo reprimo, me hace sentir real. Pero si uno vive una vida feliz y no le falta nada, para qué mierda lloraría de vez en cuando? Realmente no lo extraño al ale, tengo que confesarlo. Desde otro facebook veo las idioteces que comenta en fotos de minas que obviamente nunca le responden y cómo putea a esos clásicos muñecotes rugbiers que se sacan esas fotos medio flogger y pienso ''cómo me enamoré de eso?'' obvio que el ale es mucho más que eso, pero la cuestión de fondo es que el no es un soñador como yo. Ya no se deja guiar por las cosas que siente, no quiere volver a sentir nada de lo que sintió conmigo, se rindió por miedo a volver a sufrir, irguió su orgullo por encima de su cariño para no sentirse menos. Y yo no soy así, mi máxima creencia es el amor y es un estilo de vida que se practica para/con todas las cosas, no un novio. Avancé muchísimo y aunque a veces cueste no recuerdo un sólo momento en el que haya flaqueado y querido abandonar todo para volver a ser la vaga de antes. Sí tuve pensamientos suicidas y toda la bola, pero los consideré una prueba del alcance de mi dolor, no una idea factible. Porque es así, yo soy una soñadora. Y seguir siendo una soñadora quizás también implica tener los mismos miedos y tal vez crecer significa aprender a enfrentarlos, ponerme una meta y no dejar que nada me detenga, correr sin parar hasta llegar a donde siempre soñé, hasta donde determiné y de ahí siempre querer algo más, soñar algo más y volver a empezar esa carrera que es solamente contra mí misma queriendo saberme cada día mejor y más rápida y ágil. Habré sido impulsiva, irresponsable, desinteresada y hasta mediocre, pero nunca dejé de imaginarme que algún día iba a ser diferente y mejor. Y hoy, lo soy.

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